Sociedad

Jornadas / Los efectivos practican simulacros de emergencias

Bomberos y sanitarios, al límite en Sa Taulera ;

Gemma Marchena ;  mallorcadiario.com  - 10/06/2005

PALMA.- Los bomberos y servicios de sanitarios han vivido una jornada de lo más intensa. Durante la mañana de este viernes, una persona era rescatada de un sótano inundado de humo, mientras en el mismo edificio un médico especializado escalaba por la fachada para atender a un herido y lo bajaba por una tirolina. A sólo 10 metros de distancia, un coche volcaba y bomberos y personal sanitario intentaban rescatar a un herido atrapado. Pero todo esto es ficción. No se trata de un capítulo de la serie ‘Urgencias’, sino de unas maniobras de entrenamiento del personal sanitario y bomberos que han tenido lugar este viernes en el Parque de Bomberos de Sa Taulera.

Con motivo del XVII Congreso Nacional de Humanización de las Urgencias, bomberos y servicios sanitarios de urgencias han participado en unas jornadas de coordinación en labores de rescate con el fin de depurar las técnicas y lograr una mayor efectividad en accidentes. Así, médicos, enfermeros y demás técnicos sanitarios se han puesto en la piel de los bomberos y han conocido al detalle su labor en los accidentes.

Aunque a primera vista pueda parecer un escalador, Antonio Comas es en realidad un médico. Sin embargo, a pesar de que el arnés que lleva consigo, el casco y la ropa deportiva, Comas es un médico especializado en urgencias de rescate en montaña. El médico escala por la fachada de un edificio a una altura de 12 metros. Una vez subido a esa altura, se descuelga y procede a estabilizar al herido para bajarlo con la tirolina. Toda una peripecia que sucede en unos minutos y que es capaz de salvar la vida de la víctima. Mientras tanto, enfermeros y médicos observan la maniobra desde el suelo, donde le espera una unidad móvil de asistencia. Justo cuatro pisos más abajo, en el sótano, un técnico de emergencias queda atrapado por el humo y bomberos y médicos se preparan para bajar a rescatarle. Armados de mascarillas y bombonas de oxígeno, tienen que bajar a oscuras palpando las paredes y estabilizar a ciegas a la víctima.

Al mismo tiempo, un grupo de sanitarios intenta atender a un herido en un accidente de coche que se encuentra atrapado en el vehículo volcado. “No tiene las piernas aprisionadas, se llama José y se encuentra consciente”, dice la médico que le observa desde arriba, mientras infunde ánimos y tranquilidad al accidentado. Es estabilizado y los bomberos deciden liberar a José desde la parte trasera del coche rompiendo el cristal, entablillando al herido. En cuestión de minutos, José es liberado del coche por la ventana trasera y conducido rápidamente a la ambulancia que le espera para llevarle a Urgencias.

Estos tres casos suelen ser el pan de cada día de bomberos y sanitarios. Tal y como señala el sargento de Bomberos de Palma, Joan Rosselló, “cada vez nos encontramos con casos más complicados y es necesaria la coordinación entre bomberos y sanitarios”. Entre ellos destaca los accidentes de circulación, en los que tiene mucho que ver con “el fenómeno tunnig”. “Turismos con chapas muy débiles son modificados en motores y aspecto. Nos encontramos con los vehículos destrozados por exceso de velocidad y unas características motores desconocidas que nos impiden actuar con más celeridad”, lamenta Rosselló, que afirma que en estos casos, los accidentes de tráfico son mucho más graves.

Botellas de compresión, chapas débiles y altas velocidades “convierten estos vehículos en bombas en carretera”, afirma Rosselló. A pesar de las dificultades con las que se encuentran, bomberos y sanitarios luchan por entrenarse y reducir las secuelas de los accidentes de circulación.

Fuente/// http://www.mallorcadiario.com/index.php?option=content&task=view&id=9177